domingo, 26 de mayo de 2019

El poema de la semana (XX)

 El poema de esta semana viene de la creación poética de  Pablo Baena Liñán alumno de 3º de ESO C. Con este poema ha sido seleccionado para participar en la Escuela de Verano para Escritores Noveles organizado por el Centro Andaluz de las Letras.

Pincha AQUÍ para conocer a Pablo.



LLAMANDO A LAS PUERTAS DEL CIELO

Trafico con las metáforas
construidas de sueños rotos,
como sentirse libre
en esta ignorante dictadura,
el intruso en tus ojos vidriosos
de esperanza inacabable,
encandilado
de tu dignidad ingobernable.

Esclavo de las circunstancias
de esta lírica rebelde,
revolucionaria
como las políticas
de Thomas Sankara.

Armando versos
de titanio
como la conciencia
del pueblo proletario.
Esclavos de esta sociedad
simple y estética
en la que el obrero
sufre amnesia
y está día a día
más explotado
por este mundo,
víctima de su progreso.

Huyendo del oprobio,
y nunca estando
entre nosotros enfrentados,
que somos para ellos
lo que a los nazis Stalingrado.

miércoles, 22 de mayo de 2019

El poema de la semana (XIX)

Esta semana nuestro poema ha sido propuesto por Mari Paz Escribano, profesora de Informática del I.E.S. Alhaken II. Como gran lectora y colaboradora de nuestra biblioteca, nos invita a leer el poema «No te detengas nunca» del poeta Pedro Salinas(1891-1951)ilustre integrante de la Generación del 27

A propósito de este hermoso poema, nuestra compañera destaca la idea "de que siempre vamos a tener un sitio reservado en nuestro corazón para las personas que queremos, por muy lejos que estemos de ellas o por mucho tiempo que pase. En ese hueco, sólo caben ellas".

                                                   NO TE DETENGAS NUNCA

No te detengas nunca
cuando quieras buscarme.
Si ves muros de agua,
anchos fosos de aire,
setos de piedra o tiempo,
guardia de voces, pasa.
Te espero con un ser
que no espera a los otros:
en donde yo te espero
sólo tú cabes. Nadie
puede encontrarse
allí conmigo sino
el cuerpo que te lleva,
como un milagro, en vilo.
Intacto, inajenable,
un gran espacio blanco,
azul, en mí, no acepta
más que los vuelos tuyos,
los pasos de tus pies;
no se verán en él
otras huellas jamás.
Si alguna vez me miras
como preso encerrado,
detrás de puertas,
entre cosas ajenas,
piensa en las torres altas,
en las trémulas cimas
del árbol, arraigado.
las almas de las piedras
que abajo están sirviendo
aguardan en la punta
última de la torre.
Y ellos, pájaros, nubes,
no se engañan: dejando
que por abajo pisen
los hombres y los días,
se van arriba,
a la cima del árbol
al tope de la torre,
seguros de que allí,
en las fronteras últimas
de su ser terrenal
es donde se consuman
los amores alegres,
las solitarias citas
de la carne y las alas.

miércoles, 15 de mayo de 2019

" Yo recomiendo" Ruan Rulfo

Este jueves se celebra un aniversario más del nacimiento de Juan Nepomuceno Carlos Pérez Rulfo Vizcaíno, conocido simplemente como Juan Rulfo, quien vio la luz por primera vez un 16 de mayo de 1917.

Juan Rulfo nació en Apulco, San Gabriel, Sayula, Jalisco, y es reconocido como uno de los grandes escritores latinoamericanos del siglo XX, con la ventaja o desventaja de contar solo con dos obras: El Llano en Llamas y Pedro Páramo. Rulfo se distinguió por impregnar un nuevo estilo literario en la mayoría de sus narraciones fusionando la realidad y la fantasía al momento de recrear sus historias en contextos de la realidad mexicana. 





El ganador del Premio Nobel de Literatura, Gabriel García Márquez, reconoció que podía citar de memoria los párrafos escritos de Juan Rulfo, lo que refleja el nivel de influencia que tuvo del mexicano.
“No había acabado de escapar al deslumbramiento cuando alguien dijo que yo era capaz de recitar de memoria párrafos completos de Pedro Páramo. La verdad iba más lejos: podía recitar el libro completo, al derecho y al revés, sin una falta apreciable, y podía decir en qué página de mi edición se encontraba cada episodio”.
El también mexicano Carlos Fuentes calificó a la novela de Pedro Páramo como “misteriosa, mística, musitante, murmurante, mugiente y muda”, un texto que representa muy bien a México.
“Novela misteriosa, mística, musitante, murmurante, mugiente y muda, Pedro Páramo concentra así todas las sonoridades muertas del mito. Mito y muerte. Novela mexicana esencial, insuperada e insuperable, Pedro Páramo se resume en el espectro de nuestro país: un murmullo de polvo desde el otro lado del río de la muerte”.
El peruano Mario Vargas Llosa resalta que a Juan Rulfo le bastaron dos obras para pasar a la historia, y ser reconocido por sus símiles como uno de los mejores no solo de México, sino de la lengua española.
“Con sólo dos breves libros impecables, una colección de cuentos y una novela, Rulfo ejecuta el indigenismo verboso y exterior. Su prosa ceñida, que recrea sutilmente el habla popular de Jalisco, erige un pequeño universo sin tiempo, de violencia y poesía, de aventura y tragedia, de superstición y fantasmas, que es, al mismo tiempo que mito literario, una radiografía del alma mexicana”.
Mientras que el argentino Jorge Luis Borges simplemente se limitó a decir que “Pedro Páramo es una de las mejores novelas de las literaturas de lengua hispánica, y aun de la literatura”.


Aquí os dejo una selección de cuentos cortos e  increíbles de Juan Rufo.

 Espero que disfrutéis con su lectura !!!

#01. Acuérdate (leer aquí) 




#02. ¡Diles que no me maten! (leer aquí) 




#03. Es que somos muy pobres (leer aquí) 




#04. La noche que lo dejaron solo (leer aquí) 




#05. Luvina (leer aquí) 




#06. Macario (leer aquí) 
 



#07. No oyes ladrar a los perros (leer aquí) 




#08. Nos han dado la tierra (leer aquí) 




#09. Talpa (leer aquí) 




#10. Anacleto Morones (leer aquí) 




#11. El día del derrumbe (leer aquí) 




#12. El hombre (leer aquí) 




#13. El Llano en llamas (leer aquí) 




#14. En la madrugada (leer aquí) 




#15. La cuesta de las comadres (leer aquí) 




#16. La herencia de Matilde Arcángel (leer aquí) 




#17. Paso del Norte (leer aquí) 

lunes, 13 de mayo de 2019

El poema de la semana (XVIII)

A punto de alcanzar la mitad del mes de mayo, rodeados de una primavera exuberante casi convertida en verano, nos llega la propuesta de esta semana de parte de Francisco Ruiz-Capillas, profesor de Biología y Geología del IES Alhaken II.


Él nos recomienda un poema del poeta asturiano Ángel González  (1925-2008), miembro de la llamada Generación del 50, formada por escritores y poetas que comenzaron a publicar sus obras en los duros años de la posguerra española.


SIEMPRE LO QUE QUIERAS

Cuando tengas dinero regálame un anillo,
cuando no tengas nada dame una esquina de tu boca, 
cuando no sepas qué hacer vente conmigo 
-pero luego no digas que no sabes lo que haces.

Haces haces de leña en las mañanas
y se te vuelven flores en los brazos.
Yo te sostengo asida por los pétalos,
como te muevas te arrancaré el aroma.

Pero ya te lo dije:
cuando quieras marcharte ésta es la puerta:
se llama Ángel y conduce al llanto.



domingo, 5 de mayo de 2019

El poema de la semana ( XVII )

El poema de esta semana viene de nuestro compañero del Departamento de Lengua  José Enrique Guerra, al que vamos a conocer como autor poético. Durante unos años ha sido  miembro del Colectivo Surcos de Poesía de Sevilla con el que ha participado en recitales y libro colectivos, a la vez que ha organizado actividades poéticas de todo tipo (incluido un certamen que mientras estuvo vigente adquirió cierta relevancia).

                                                                    LA PRIMA

 Es curioso cómo funciona la memoria.

 Llevo años en el suelo 
 y ahora me acuerdo de cómo me caí.
 Ahora tiene sentido.
 Ya sé de quién es esa voz
 que me llama, 
 que me anima
 y que me consuela. 

Cuando era niño, 
corría alrededor de la casa de mi tía.
 Era verano y el sol golpeaba la casa. 
Pero ¿cómo pude olvidarme de esa casa? 
Una niña atlética y hábil, 
como sólo puede serlo alguien de diez años, 
me adelantó. 

Por supuesto que me adelantó,
 yo siempre llego tarde a los sitios. 
Pero de repente tropezó y cayó de bruces al suelo.
 Yo, sin tiempo para reaccionar,
 también caí.

Hoy estoy ya tranquilo.
 Aquella dulce y decidida niña se levantó.
 Es ya una mujer que me saca muchas vueltas de ventaja. 
Y ella me llama, me anima y me consuela 
cada vez que pasa por mi lado.
 Y es que no me he levantado. 
O ¿estoy aquí por otra caída? 

No me acuerdo bien. 
Mi problema es que disfruto demasiado en el suelo 
 y tengo miedo de levantarme 
y no saber qué hacer después. 

Por favor, no me dejes detrás que me da miedo. 
No pares de llamarme, de animarme, de consolarme. 

Por favor, no te olvides de mí...